Pelo, hilo y bandas depilatorias
54 x 60 cm
L’mono, Bilbao.
2010

La obra EL BELLO PELO se materializa a través de la confección de un traje de pelo diseñado para un cuerpo sin vello. Esta obra pone de manifiesto las modas y estereotipos de género, así como los ideales de belleza socialmente construidos en las sociedades patriarcales. Concretamente, aborda la tendencia en aumento de la depilación o eliminación total del vello corporal, generando así un diálogo con los movimientos feministas que cuestionan aspectos estéticos y éticos establecidos por las sociedades y culturas patriarcales.

Los humanos nos caracterizamos por nuestra casi absoluta falta de vello corporal en comparación con el resto de mamíferos. La casi completa ausencia de vello, resultado de la evolución natural y los hábitos modernos de depilación, contrasta con la necesidad ancestral de cubrir nuestros cuerpos con pieles de animales. A pesar de que en la actualidad eliminamos nuestro vello conscientemente, seguimos necesitados de otra capa de abrigo que cubra y proteja nuestro cuerpo vulnerable.

La obra artística aborda las cuestiones vinculadas a la depilación, una presión estética que recae principalmente sobre las mujeres, de manera irónica y metafórica mediante un traje confeccionado a partir de pelo atrapado en bandas de cera depilatoria. Este vestido, que simula la apariencia de la piel humana gracias al tono cálido de la cera de abeja, representa visualmente la contradicción entre la conformidad a las normas estéticas y la necesidad humana de protección.